El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, recibió su primera dosis de la vacuna contra el Covid-19, el pasado sábado 16 de enero como voluntario de capellanía de atención médica en el Hospital St. Thomas de Londres. Durante la pandemia, el arzobispo Welby ha sido voluntario en el hospital como parte del equipo de capellanía del Servicio Nacional de Salud (NHS), donde ha colaborado con atención espiritual y apoyo a pacientes, personal y visitantes.
“Quiero animar a todos a que se pongan la vacuna Covid-19 cuando estén invitados”, dijo el arzobispo Justin. “El personal de todo el Servicio Nacional de Salud y los trabajadores de la salud de todo el mundo están bajo una inmensa presión en la primera línea de esta pandemia. Merecen no solo nuestra admiración, sino nuestro apoyo, y recibir la vacuna cuando tenemos la oportunidad es algo que todos podemos hacer para ayudar a aliviar la carga sobre ellos».
En esa misma línea, el Reverendísimo aseguró que “el rápido desarrollo de la vacuna es una respuesta a la oración, y es fundamental para la recuperación de esta terrible pandemia. Jesucristo nos llama a amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos. Recibir la vacuna es parte de ese mandamiento: Podemos mostrar nuestro amor mutuo manteniéndonos a salvo de esta terrible enfermedad. A todos en este país y en todo el mundo, quiero decirles, por favor, acepten la invitación para recibir la vacuna cuando llegue, y alienten a todos a su alrededor a hacer lo mismo».
Mientras tanto, tres catedrales de la Iglesia de Inglaterra se unen a los esfuerzos del gobierno del Reino Unido para vacunar a todos los adultos en el país para fines de septiembre. Las catedrales de Lichfield, Salisbury y Blackburn se encuentran entre los 10 centros de vacunación masiva de Covid que se han abierto en Inglaterra.
*Nota tomada de: www.anglicannews.org